¿Lo sabías?

El bambú puede ser muy sostenible si se cultiva en las condiciones adecuadas. Es de crecimiento rápido y de muy bajo mantenimiento, ya que no necesita fertilizantes ni grandes cantidades de agua.

No necesita ser replantado ya que se autogenera a partir de sus propias raíces. Además, produce un 35% más de oxígeno que otros árboles de madera dura.

El bambú es ideal cuando se usa en su forma original cruda, para muebles u objetos como cepillos de dientes o cubiertos. Es una alternativa ecológica a otros tipos de árboles de madera dura como el roble (que crece mucho más lentamente).

Sin embargo, ten en cuenta que muchas telas de bambú en el mercado son una forma de rayón donde el proceso de fabricación es altamente intensivo e involucra muchos productos químicos dañinos.

Aunque la producción de bambú es más sostenible que el algodón, el proceso de fabricación de tejidos de bambú utiliza productos químicos altamente tóxicos y no se considera una solución sostenible.

En conclusión, escoge productos de bambú cuando estén hechos de bambú crudo, como muebles, cepillos de dientes, cubiertos y otros objetos. Es una alternativa sostenible a la mayoría de las maderas!
¡Fácil!