¿Lo sabías?
A pesar de estar en la «nube», tus datos (imágenes, vídeos, música, etc.) todavía necesitan ser almacenados físicamente en un dispositivo en algún lugar.
Las empresas que ofrecen servicios cloud necesitan disponer de grandes servidores dedicados al almacenamiento de tus datos, que son básicamente grandes almacenes llenos de servidores que funcionan las 24 horas del día, los 7 días de la semana, los 365 días del año.
Estos centros de datos son extremadamente contaminantes. Consumen enormes cantidades de electricidad las 24 horas del día, los 7 días de la semana, y requieren sistemas de aire acondicionado robustos para mantener todos estos servidores a la temperatura adecuada sin sobrecalentarse.
Reduce tu huella preguntándote a ti mismo: ¿Realmente necesito todos los archivos que tengo en la Nube? Si tienes archivos viejos que no necesitas, ¡bórralos! Reducirás el almacenamiento necesario y tu huella 😉
¡Fácil!