¿Sabías que el chicle es uno de los mayores problemas de basura después de las colillas?

El principal ingrediente del chicle moderno es el poliisobutileno, un caucho sintético derivado del petróleo crudo, y no es desagradable.

Cuando tires un chicle, no esperes que desaparezca. Permanecerá allí para siempre, si no se lo llevan para que termine en el océano o sea comido por los animales.

Si realmente sientes la necesidad de masticar, ¿por qué no pruebas una de estas alternativas más sostenibles?

El chicle de Chicza es 100% natural y orgánico, certificado por el árbol de Chicozapote en el bosque Maya.

Para un aliento fresco, puedes masticar hojas de menta, clavos o vainas de cardamomo.

También puedes elegir mentas, pero asegúrate de encontrar unas sin envoltorio de plástico para evitar desperdicios (¡no es fácil!)

Seguramente una de estas opciones te funcionará.

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